Mourinho aguantará estas dos semanas
intrascendentes que quedan para acabar la Liga (Real Sociedad, 26 de mayo a las
20:00 horas, y Osasuna, aún por determinar) y se irá del club cerrando una
etapa de 1.101 días con sólo una Copa, una Liga y una Supercopa que agregar al
museo del Real Madrid.
Nadie en el club piensa que se
produzca una salida precipitada sin terminar la temporada. No está en el guión,
aunque Mourinho siempre es imprevisible. Todos juegan con las cartas marcadas y
nadie guarda sorpresas.
Florentino Pérez sabe que se marcha y
espera con atención la reunión que tendrá hoy Ancelotti con los dueños del
Paris Saint-Germain. Es lo único que le interesa. Eso y las próximas Elecciones
a la presidencia. Con la temporada terminada, el portugués es pasado para el
presidente. Mourinho, más apático y distante que nunca, dice de cara a la
galería que tiene una reunión pendiente con Florentino. Pero ya está todo
dicho. El técnico se dedicará a ir a Valdebebas. Su trato con los futbolistas
es mínimo y el Chelsea espera a que se desvincule del Madrid.
Junta. A día de hoy
no hay Junta Directiva prevista para mañana, ni previsión de convocarla de
urgencia. Tampoco hay intención de que se anuncie con adelanto su marcha.
"Todos sabemos lo que hay, no hay nada que decir", aseguraba una voz
autorizada a este periódico. La cúpula directiva y el director general, José
Ángel Sánchez, van a dejar correr el tiempo, que se agoten los días hasta el
adiós, que será el 1 o el 2 de junio, tras el partido contra Osasuna,
precisamente en el Santiago Bernabéu.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
DÉJANOS TU OPINIÓN, ES IMPORTANTE!